miércoles, 28 de enero de 2009



Irme, irme! Ya no sueño sino con eso.
Irme a una tierra cualquiera donde la villanía
no sea el estado social de la gente,
donde a lo menos las afirmaciones y
negaciones tengan el sentido filosófico
que todos los léxicos les prestan,
donde el honor se asiente en las almas y
no en los labios.
¡Irme, huir de aquí,
por dignidad, por estética,
por instinto de conservación!
¡Es que yo me noto aún sano en esta sociedad de leprosos!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"por dignidad, por estética" me encantó esa conjunción de conceptos

después de todo no hay estética sin dignidad

caprina dijo...

gracias por comentar mis escritos =D